viernes, 5 de marzo de 2010
Cuídate
En el mundo has andado siempre igual que yo, sin las armas necesarias para evitarte heridas o causar algunas, pero sobre todo, totalmente desprovisto de la capacidad de aprender de tus errores.
Te veo apenas y te he reconocido desde siempre porque me veo reflejada en ti, a veces proyectada 10 años, tan experto como severo, por esa tu forma de pensar; y otras, me veo en ti, 5 años ha, cuando te veo armando entretenido tus sueños pueriles y descargando tus emociones, como lo hice desprevenida alguna vez.
Y yo sólo quiero pedirte que tengas cuidado.
Ten cuidado, cuidado de mí porque carezco de corazón, aunque a veces me recuerdes que lo tuve alguna vez. Cuidado de mí, porque le conozco al mundo ahora su lado repugnante y no quiero mostrártelo.
Ten cuidado de mí, porque yo tengo miedo y no quiero compartirlo contigo.
Ten cuidado de mí, porque saldré huyendo cuando me sienta feliz. Porque diré No gritando Sí con los ojos y no entenderás. Porque desapareceré algún día.
Ten cuidado de mí, porque yo fui tú.
Gracias por mostrarme como era y que era mejor así.